La conclusión es que todas las personas son candidatas para la CAA, si no pueden expresar sus deseos, necesidades, ideas, pensamientos, preguntas, miedos… a quien quieran, cuando quieran y como quieran, el único requisito es estar vivo.
La comunicación es un derecho humano básico, y no existe una habilidad previa que justifique retrasar el acceso a ese derecho. Por el contrario, la comunicación, es la habilidad previa para el éxito académico, social y conductual.
Cómo profesionales estamos obligados a derribar falsos mitos y creencias, se asumen conocimientos sin evidencia que las respalde, y aunque tuvieran evidencia tendríamos que actualizarnos para ajustarnos al alumnado, las evidencias o paradigmas también sufren revisión y mejoras.